Se consume todos los días, pero nadie sabe su daño: puede destruir el efecto de las drogas.


Se afirma que la canela utilizada en pequeñas cantidades en la avena o en bebidas calientes en la vida diaria no causa ningún problema. Sin embargo, se afirma que los suplementos obtenidos a partir de la corteza de canela y que contienen altos niveles de cinamaldehído pueden suponer un riesgo, especialmente para quienes toman medicación regularmente. Los científicos enfatizan que la canela puede interactuar con los anticoagulantes, lo que puede aumentar el riesgo de sangrado. Ahora hay hallazgos que indican que esta interacción podría involucrar a un grupo mucho más amplio de medicamentos.

La canela es conocida desde hace mucho tiempo por su contenido antioxidante y su contribución a la salud del corazón. Algunos estudios de laboratorio incluso sugieren que la canela podría prevenir la formación de proteínas tau que desencadenan la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, estos hallazgos aún no han sido confirmados clínicamente. El profesor Khan indicó que las personas con enfermedades crónicas deben tener especial cuidado y advirtió: «Quienes padecen afecciones como hipertensión, diabetes, cáncer, asma o depresión deberían consultar con un profesional de la salud antes de usar cualquier suplemento».

El equipo de investigación también observó que existían diferencias significativas entre los tipos de canela utilizados en las cocinas. Se afirma que algunos tipos de canela que se venden en los estantes del mercado contienen altos niveles de cumarina, lo que puede causar graves problemas de salud en personas que usan anticoagulantes. Por el contrario, se informó que el aceite de canela, que a menudo se utiliza por sus propiedades antibacterianas, no presentaba riesgos.

Los científicos dicen que se necesitan más estudios para comprender mejor cómo afecta la canela al cuerpo. Según los expertos, no todos los productos utilizados como suplemento pueden ser inocuos y pueden acarrear graves consecuencias para la salud.
ntv