Las 11 mejores camisetas que el dinero puede comprar

Comprar una prenda básica como una camiseta puede parecer fácil, pero en realidad es todo lo contrario. Dado que es una prenda que probablemente usarás sola o debajo de otra prenda, hay algunos factores a tener en cuenta.

Ajuste: Si compras una camiseta solo para usarla como capa base, busca opciones más ajustadas y con una silueta más larga para meterla dentro de los pantalones. Así no tendrás que preocuparte por verte demasiado voluminosa ni por tener un dobladillo incómodo que se mueva todo el día.

Material: Esto es clave. En la mayoría de los casos, una camiseta es la capa que está directamente en contacto con la piel, por lo que debe sentirse lo más suave posible. Las camisetas de algodón puro, preferiblemente de fibra larga o cepillada, son las más suaves. Si planeas hacer ejercicio o moverte mucho con ella, busca mezclas con materiales elásticos como la licra o el elastano. Dependiendo de cómo planees usarla, considera características de rendimiento como telas que absorban la humedad y telas como las de Mack Weldon con propiedades antiarrugas.

Estilo: El estilo de camiseta que elijas debe ir acorde con la ocasión y el estilo para el que la uses. Para ocasiones más elegantes, como usar una camiseta debajo de un blazer, un cárdigan o una camisa de botones, debería ser una más ajustada. En estos casos, los colores neutros probablemente también sean la mejor opción si la usas debajo de una camiseta transparente. Las siluetas más sueltas, holgadas y cuadradas transmiten un aire más casual y relajado, y, sinceramente, también más cómodo.

Largo: Elige un largo de camiseta que se ajuste a tu altura. A menos que busques un look más corto, el dobladillo inferior de la camiseta debe llegar justo debajo de la cadera. Esto te dará suficiente espacio para meterla dentro de los pantalones o usarla por fuera sin tener que bajarla todo el día.

Dobladillo: El estilo del dobladillo puede ser con acabado o sin rematar, y el que elijas dependerá totalmente de dónde lo vayas a usar. Naturalmente, un dobladillo con acabado luce más limpio y ordenado, ideal para ocasiones especiales. Un dobladillo sin rematar es más informal y podría comprometer la durabilidad y longevidad de tu camiseta después de lavarla.