Caminata de 10 minutos después de comer: Los sorprendentes beneficios de un simple hábito diario


Una caminata de 10 minutos después de una comida puede hacer más por tu salud de lo que crees. Este pequeño hábito puede ser de gran ayuda para mantenerse activo, mejorar la sensibilidad a la insulina y protegerlo de enfermedades crónicas como enfermedades cardíacas y diabetes. Una caminata después de comer puede controlar picos de azúcar en sangre del 30% o más, incluso en personas sin diabetes, según un estudio publicado en la revista Nutrients. En la era de los microejercicios, levantarse y dar una caminata ligera de vez en cuando puede mejorar el metabolismo, el estado de alerta y el estado de ánimo. Las caminatas después de las comidas tienen la ventaja adicional de equilibrar los niveles de glucosa durante el período de 30 a 60 minutos posterior a una comida, es decir, el período posterior a las comidas, cuando los niveles de glucosa están en su punto máximo. Incluso en personas sanas, estos picos de azúcar en sangre pueden contribuir a la resistencia a la insulina y aumentar el riesgo a largo plazo de enfermedades cardíacas, problemas renales y daño nervioso. Es por esto que hoy en día la prediabetes se toma tan en serio, porque puede afectar la salud incluso antes de la aparición de la diabetes.

Tus músculos ayudan a absorber el azúcar de la sangre, especialmente después de comer. Cuando usted se mueve o hace ejercicio, su cuerpo activa un sistema especial (llamado GLUT-4) que atrae azúcar hacia sus músculos, incluso si su insulina no está funcionando bien. Entonces, el simple hecho de estar activo ayuda a reducir el nivel de azúcar en sangre de forma natural. Lo bueno es que basta con hacer ejercicio ligero o una caminata corta para obtener estos beneficios y controlar los picos de azúcar después de las comidas.

Según un estudio, existe amplia evidencia de que mover el cuerpo dentro de los 30 minutos posteriores a una comida es el mejor momento para invertir en su salud. Más allá de este período de tiempo, la capacidad del cuerpo para reducir los niveles de glucosa puede disminuir.

Los estudios muestran que incluso caminar entre 10 y 15 minutos o hacer ejercicio pueden reducir eficazmente las fluctuaciones de glucosa y ayudar a mantener la salud metabólica y reducir el riesgo de diabetes y otros problemas de salud. En el estudio publicado en Diabetologia, investigadores de Nueva Zelanda descubrieron que caminar solo 10 minutos después de cada comida puede reducir los niveles diarios de azúcar en sangre de manera más efectiva que una sola caminata de 30 minutos en cualquier otro momento del día. Según un estudio publicado en Diabetes Care, los adultos mayores pueden tener un mejor control de sus niveles de glucosa si caminan durante tres sesiones de 15 minutos después de cada comida, en comparación con una sola sesión de caminata de 45 minutos.

No te sientes después de comer. Utilice este tiempo para hacer llamadas de negocios o realizar otras tareas que requieran caminar ligeramente. No tomes una siesta inmediatamente después de una comida, en lugar de eso sal al sol y disfruta de una caminata.
Si estás en casa, intenta caminar unos 1.000 pasos. Incluso puedes hacer esto mientras miras tu programa de televisión favorito.
Interrumpir largos períodos de estar sentado con una caminata ligera puede ayudar a mejorar los niveles de glucosa e insulina después de las comidas, en comparación con estar de pie solo.

Prevención de la diabetes: No permitir que los niveles de glucosa aumenten después del almuerzo puede ayudar a reducir el estrés metabólico y el riesgo de desarrollar diabetes. Si bien esto puede tomar sólo 10 minutos, podría ahorrarle problemas para toda la vida.
Pérdida de peso: Caminar tan solo 10 a 15 minutos puede reducir los picos de glucosa. Esto significa que se secreta menos insulina y se almacena grasa, lo que puede conducir a la pérdida de peso. Esto hace que los paseos por la tarde sean más rentables que los de la mañana.
Salud del corazón: este simple hábito puede ser una bendición para la salud de su corazón. Cuando sus niveles de glucosa son estables, puede ayudar a reducir el estrés oxidativo y proteger los vasos sanguíneos, lo que puede reducir su riesgo de enfermedad cardíaca.
Reduce la fatiga: si tu productividad tiende a disminuir después de comer, esta es una solución eficaz. Una caminata después de comer puede mejorar la circulación y el metabolismo, compensando cualquier somnolencia que pueda sentir después de comer.
ntv