Los tesoros imperiales reescriben la historia sumergida de los Campos Flégreos

En el fondo marino frente al puerto de Miseno, en Bacoli, antigua base naval de la Classis Misenensis, la flota más importante del Imperio romano en el mar Tirreno, resurge un fragmento de la historia romana antigua. Una operación arqueológica sin precedentes ha sacado a la luz importantes hallazgos de la época imperial en la zona de los Campos Flégreos, revelando nuevas piezas del glorioso pasado de la colonia romana de Miseno. Dos arquitrabes de mármol finamente decorados y un fragmento de una columna de mármol cipollino fueron recuperados del mar, donde habían permanecido sumergidos durante siglos, en un tramo entre Punta Terone y Punta Pennata.
La intervención forma parte de un proyecto más amplio para proteger y valorizar el patrimonio sumergido de los Campi Flegrei, una de las zonas arqueológicas subacuáticas más significativas del Mediterráneo. La recuperación es fruto de un acuerdo entre la Superintendencia Arqueológica de la zona de Nápoles y el Ayuntamiento de Bacoli, con el apoyo operativo de los Carabinieri Subacquei, la Guardia di Finanza y la Guardia Costera.
El montículo arqueológico del que proceden los hallazgos es un banco de materiales de construcción y decoración que se extiende por unos 90 metros de largo y 2 de alto, situado a una profundidad de entre 5 y 9 metros. No es el resultado de un derrumbe aleatorio, sino más bien de una acumulación intencionada, probablemente funcional para la creación de una barrera contra las mareas de tempestad, como lo confirman los rastros de los agentes atmosféricos y la erosión selectiva de los materiales. Desde principios de la década de 1980, se han realizado numerosos y sorprendentes hallazgos ocasionales en este montículo, mientras que una excavación sistemática realizada en 1996, a pesar de la parcialidad de la investigación, sacó a la luz una gran cantidad de valiosos hallazgos y datos histórico-arqueológicos de gran importancia (estatuas, bases inscritas, fragmentos de arquitrabes, bases de columnas), ahora conservados en el Museo Arqueológico de los Campos Flégreos. Los hallazgos, una vez desalinizados y restaurados en el Parco Borbonico del Fusaro, se expondrán en una exposición permanente en el Palazzo dell'Ostrichina, transformando un rincón de la ciudad en un nuevo centro museístico integrado.
Se trata de elementos escultóricos y decorativos pertenecientes a los edificios públicos de la colonia romana que salpicaban la ensenada, antes de que el bradisismo los sumergiera. El montículo arqueológico, que constituye un valioso acervo de información y datos históricos, representa una intervención posantigua, creada no mediante la superposición de estructuras derrumbadas, sino mediante la acumulación intencionada de materiales de construcción, probablemente con el objetivo de obtener una barrera protectora enterrada, similar a la función que desempeña el rompeolas moderno, contra la penetración marina generada, en particular, por el siroco.
La interpretación se sugiere, explica la Superintendencia, por el estado de conservación de los hallazgos, que muestran la cara inferior corroída por litodomos, aunque no está en contacto directo con el medio marino, y algunos signos de percolación que conservan algunas arquitrabes en la superficie, como si hubieran estado expuestas a los agentes atmosféricos durante mucho tiempo, y por tanto apartadas tras el derrumbe o desmantelamiento intencional, para ser posteriormente utilizadas como materiales reutilizados.
Por lo tanto, tanto por la protección de los hallazgos arqueológicos a merced de los agentes naturales, como por el alto interés arqueológico que tiene el conocimiento de la consistencia de dichos hallazgos conservados en el fondo marino, hace un año se firmó un memorando de entendimiento entre la Superintendencia y el Municipio de Bacoli, gracias también al interés del alcalde Josi Gerardo Della Ragione y Mauro Cucco, teniente de alcalde del Municipio de Bacoli con responsabilidad en Cultura, destinado a realizar investigaciones indirectas en el área del Puerto de Misenum, con vistas a promover y apoyar conjuntamente investigaciones, estudios y otras actividades de recopilación de conocimiento sobre el patrimonio cultural sumergido y promover acciones de sensibilización relacionadas con las cuestiones de protección y valorización del patrimonio cultural costero y marino.
Por lo tanto, se realizó un estudio completo del montículo, que incluyó caracterización 3D, fotografías detalladas y estudios hiperespectrales de las secciones más representativas del montículo y del fondo marino sobre el que se asienta. Esto permitió identificar algunos hallazgos notables considerados aptos para su recuperación y adquisición como patrimonio estatal, mediante una delicada operación de rescate con globos elevadores, carga sumergida suspendida y transporte marítimo con la ayuda de la lancha patrullera de los Carabineros Subacuáticos. En concreto, se trata de dos arquitrabes de mármol con molduras en relieve y un fragmento de columna de mármol cipollino.
La importancia de estos hallazgos radica en los datos arqueológicos e históricos que proporcionan, constituyendo una pieza importante de la reconstrucción de la historia del asentamiento de la colonia romana de Miseno y de sus monumentos públicos, sobre los que aún se sabe poco.
El superintendente Mariano Nuzzo, quien siguió personalmente toda la operación desde el mar, ilustrando los procedimientos seguidos y las distintas fases de la recuperación, declaró: «La recuperación de estos hallazgos representa un resultado de extraordinaria importancia histórica y científica. Los fragmentos de mármol hallados dan testimonio de la riqueza e incluso la importancia simbólica de los complejos públicos que caracterizaron a toda la colonia. Se trata de elementos arquitectónicos que probablemente pertenecieron a edificios que representaban el poder imperial, estrechamente vinculados al Classis Misenensis. Estos hallazgos no solo enriquecen nuestro conocimiento del paisaje urbano de la época, sino que también nos ofrecen una imagen vívida y tangible de la dimensión política, social y cultural de Miseno en el contexto del Mediterráneo antiguo».
El alcalde de Bacoli, Josi Gerardo Della Ragione, quien también estuvo presente durante la operación de recuperación, declaró: «Es un día histórico para Bacoli y los Campos Flégreos. Recuperar maravillas de la época romana de nuestro fondo marino significa sacar a la luz tesoros que enriquecerán la oferta turística de la ciudad. Y califica al Mar Flégreo como un tesoro de tesoros aún por descubrir. Esto ocurre también en un rincón del mundo que ha coexistido con el bradisismo durante milenios. Desde Baie hasta Misenum, pasando por toda la costa bacolesa. Así, el Parque Vanvitellian se convertirá aún más en un centro museístico de diferentes épocas y culturas interconectadas. Agradezco al Superintendente Mariano Nuzzo su gran sensibilidad, con quien se mantiene una sinergia capaz de potenciar la arqueología, los paisajes y la cultura como motor indiscutible del desarrollo sostenible al que nuestro territorio debe tender».
Adnkronos International (AKI)