Porque en Celine no serás la persona más extravagante de la fiesta, pero sí tendrás el mejor blazer y la actitud para llevarlo.

“ Hemos estado pensando en lo que Celine es y no es ”, escribe Michael Rider en una carta a sus invitados sobre el diseño de esta colección de verano 2026, su segunda ( después de la de julio ) para la casa. ¿Qué es Celine ? Estilo parisino, un armario auténtico, ropa de calidad. ¿Qué no es Celine? Moda que cambia con las tendencias, una marca ultraconceptual, lujo inasequible. Michael Rider conoce la casa como la palma de su mano, porque aunque fue nombrado hace menos de un año, fue la mano derecha de Phoebe Philo , quien impulsó la marca a la escena de la moda entre 2008 y 2017. Eso no es suficiente para que sea un éxito, pero ya es mucho para marcar el rumbo en una industria de la moda completamente desorientada.

"Celine no es una marca que salte de un concepto a otro cada temporada", explicó al final del desfile. "Esta colección de verano 2026 es, por lo tanto, una continuación de la anterior; es la misma mujer, solo que hace calor afuera y está haciendo las maletas para irse de vacaciones... ". Por eso, el domingo por la tarde, el estadounidense invitó a la caravana de la moda a hacer las maletas y abandonar el frenesí de la Semana de la Moda para reunirse con él en el Parc de Saint-Cloud. Organizar un desfile fuera de París en plena semana de la colección siempre es arriesgado; se necesita un cierto nivel de popularidad para motivar a la gente a viajar en estas condiciones y a pesar de los atascos. Afortunadamente, el público siente curiosidad por descubrir esta nueva Celine, bajo el sol, algo que no estaba garantizado dado el clima catastrófico de los días anteriores.

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El aire es fresco, pero las chicas (y los pocos chicos) que desfilan por la pasarela no le temen a nada, seguras de sí mismas con su vestidito baby doll de seda bouclette y preciosas zapatillas de cuero, su gabardina holgada forrada de fular de seda, sus pantalones negros de corte impecable, realzados por un cinturón con hebilla maximalista con el logotipo, o su frac azul marino que barre el suelo con su cesta gigante. Es la parisina que se escapa de fin de semana a la boda de unos amigos en la Provenza. Elegante y moderna con su vestido de cuello alto de algodón de neopreno blanco óptico sobre pantalones anchos de lana color marfil, y con sus gafas de lunares de digna nieta de Polly Maggoo.

“ En Céline, probablemente no serás la persona más rara ni extravagante de la fiesta, pero tendrás el mejor blazer y la actitud para lucirlo”, afirma el director artístico, con un don para la palabra. Cuando un periodista italiano le preguntó si esta constancia siempre había formado parte de su forma de trabajar, respondió: “ Forma parte de mi personalidad, pero también viene con la madurez. No es una crítica a quienes se adhieren a las tendencias, pero he madurado esta idea y me gustan las personalidades y las marcas que defienden una postura y se aferran a ella. Lo mejor de nuestras profesiones es cuando podemos crear algo hermoso y duradero”.