Un resfriado o una gripe despiertan células cancerosas ocultas en los pulmones

Las infecciones respiratorias comunes, como el covid-19 y la gripe, pueden despertar células cancerosas de mama latentes que se han propagado a los pulmones, lo que prepara el terreno para nuevos tumores metastásicos. Los hallazgos, publicados en la revista 'Nature' y obtenidos en ratones, ha sido respaldados por investigaciones que muestran un aumento en la mortalidad y la enfermedad pulmonar metastásica entre los supervivientes de cáncer infectados con el SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19.
Según la investigación, los virus respiratorios provocan que las células metastásicas del cáncer de mama proliferen en los pulmones.
El cáncer de mama es el tipo de cáncer más diagnosticado en mujeres. Tras una remisión inicial, las células cancerosas pueden permanecer latentes durante años antes de que la metástasis (en los pulmones u otros órganos) cause una recaída. Las infecciones virales respiratorias, como el SARS-CoV-2, se asocian con inflamación, lo que puede desencadenar procesos que influyen en la metástasis.
Un aumento en las tasas de mortalidad por cáncer durante los dos primeros años de la pandemia de COVID-19 llevó a los investigadores de la Universidad de Colorado, el Centro Oncológico Integral Montefiore Einstein (MECCC) y la Universidad de Utrecht (Países Bajos) a estudiar los efectos de las infecciones por el virus de la gripe y por SARS-CoV-2 en los resultados del cáncer de mama en modelos murinos.
«Nuestros hallazgos indican que las personas con antecedentes de cáncer pueden beneficiarse al tomar precauciones contra los virus respiratorios, como la vacunación cuando esté disponible, y discutir cualquier inquietud con sus proveedores de atención médica», asegura Julio Aguirre-Ghiso, codirector del estudio.
Algunas evidencias sugerían que los procesos inflamatorios pueden reactivar las células cancerosas diseminadas (CCD), células que se han separado de un tumor primario y se han propagado a órganos distantes, permaneciendo a menudo latentes durante largos periodos. «Durante la pandemia de COVID-19, algunos estudios sugirieron un posible aumento en las tasas de mortalidad por cáncer, lo que refuerza la idea de que la inflamación grave podría contribuir a la reactivación de las CCD latentes», afirma Aguirre-Ghiso.
Los investigadores utilizaron modelos murinos de cáncer de mama con células cancerosas latentes en los pulmones, similares a la enfermedad humana. Al exponer a los ratones al SARS‑CoV‑2 o al virus de la influenza, estas infecciones respiratorias reactivaron las células latentes, provocando una rápida proliferación metastásica y la formación de lesiones pulmonares en solo dos semanas.
La pandemia de COVID-19 brindó una oportunidad única para investigar el efecto de las infecciones por virus respiratorios —en este caso, el SARS-CoV-2— en la progresión del cáncer.
Los investigadores analizaron dos grandes bases de datos para evaluar el impacto de la COVID‑19 en pacientes con antecedentes de cáncer.
En el UK Biobank, con supervivientes de cáncer en remisión, quienes dieron positivo a COVID‑19 tuvieron casi el doble de riesgo de morir por cáncer en comparación con quienes no se infectaron, especialmente durante el primer año tras la infección.
En la base de datos Flatiron Health, pacientes con cáncer de mama que contrajeron COVID‑19 mostraron un 50 % más de probabilidad de desarrollar metástasis pulmonares que aquellas sin diagnóstico de COVID‑19. Estos resultados reflejan una posible reactivación de células cancerosas latentes, similar a lo observado en modelos animales.
«Las infecciones virales respiratorias forman parte de nuestras vidas para siempre, por lo que necesitamos comprender sus consecuencias a largo plazo», señala el autor principal, James DeGregori.
Los hallazgos, escribe, «sugieren que los sobrevivientes de cáncer podrían tener un mayor riesgo de recaída metastásica tras infecciones virales respiratorias comunes».
Es importante destacar que el estudio se centró en el período anterior a la disponibilidad de las vacunas contra la COVID-19.
abc